Aquí tenéis el olivo más conocido de Mallorca, el Olivo de Cort. Se transplantó en 1989 desde la Serra de Tramuntana, exactamente de Pedruixella Petit (Pollença), como símbolo de paz y arraigamiento a la tierra.
Cuando su propietario conoció el destino del olivo, lo regaló al municipio. En aquel momento pesaba unas 3-4 toneladas. No se sabe su edad con certeza, pero se cree que tiene unos 500-600 años.